Estas son las palabras de Walter, en representación de todos los vecinos del Asentamiento 17 de noviembre, que resumen la primera jornada de movilización de los compañeros al edificio del ANMAT, en conjunto con la Coordinadora de Barrios y Asentamientos del Gran Bs. As.Al mismo tiempo, los que no pudieron ir hasta el Ministerio, cortaron Puente La Noria en apoyo a sus compañeros, demostrando que “el sur también existe”. A pesar de los contratiempos, la falta de recursos para transportar a los vecinos hasta el centro porteño y la lluvia incesante, los compañeros del Asentamiento dieron un gran ejemplo de organización y determinación a la hora de dar presencia en la calle. Los compañeros nos demostraron una vez más que los barrios siguen dando la pelea contra un Estado que no los representa, no revierte la situación estructural de pobreza, además lleva adelante las políticas que profundizan el saqueo y la miseria generalizada y al que no le tiembla el pulso a la hora de reprimir y perseguir a los militantes de base.Ellos siguen haciendo un esfuerzo humano admirable, junto a su gente, construyendo una organización barrial y popular desde abajo, dando en jornadas como las del 31/01/09.
Un ejemplo admirable de militancia para nosotros, el estudiantado secundario yuniversitario.
La Coordinadora de Barrios y Asentamientos del Gran Bs.As. Junto a la Comisión de Vecinos del Asentamiento 17 de Noviembre de Lomas de Zamora, junto a los compañeros de Convocatoria por la Liberación Nacional y Social, dirigentes de la Juventud Guevarista y otros compañeros nos movilizamos desde temprano con lluvia, con barro, pero con mucha decisión, sabemos que cuando llegue el invierno el clima entorpece la construcción no tanto como la desidia política de no resolver los problemas mas urgentes de mas de 30 años de liberalismo salvaje. Se privilegia a las empresas, que incluso tienen las tasas de ganancias más altas del mundo. Los banqueros recibieron un salvataje de miles de millones de dólares y ahora nuevamente hay que rescatar al sistema o mejor dicho a un puñado de capitalistas, para que sigan acumulando, privilegios y riquezas mientras la deuda externa se paga con el sacrificio de las mayorías populares con los impuestos al consumo, injusto y confiscatorio, ya que el 21 % de 10000 no es lo mismo que sacarle el 21% al plan jefes y jefas que recibe una limosna de $150.
Las madres con sus pequeños marchaban a pesar de su andar lento, otras con sus chicos en brazos, en algunos casos embarazadas de mas de 6 meses, todo un ejemplo de que se puede y nadie nos impedirá recorrer el camino de conquistar la justicia social.
Adentro, en los palacios, un ejercito de profesionales con ojos sorprendidos por que cortamos Av. de Mayo al 800, sede de la Subsecretaría de Abordaje Territorial del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, rodeados de policías civiles motorizados, a pie y oficiales preocupados por el tránsito, no por las familias, nunca.
Éramos alrededor de 1000 compañeros que nos hicimos escuchar.
Nos atendió, Mariela González, próxima Directora en la Subsecretaria de Abordaje Territorial del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, que encabeza Sergio Berni, quien llamaba preocupado por teléfono.
En síntesis, van al asentamiento con las tarjetas de alimentos para todas las familias, las pensiones para las madres con 7 hijos, discapacitados, a mayores de 70 años, nos anunciaron que en fines de febrero se implementará la autoconstrucción de las viviendas cuando apenas se resuelva el dominio del predio, a través de cooperativas de trabajo con convenio de la UOCRA, para todos los trabajadores. El martes abordaremos los problemas de los barrios en particular con Sergio Berni y con Carlos Montaña sobre la infraestructura urbana, las viviendas, las escuelas, las familias en situación crítica, y el trabajo digno como eje de la llamada distribución. Para el asentamiento pedimos agrimensores, relleno y nivelación, casillas, duchas comunitarias, baños químicos. redes de electricidad y agua seguras, ropa calzado colchones, muebles, chapas etc.
Se rompió el piqueterismo de la limosna y esta naciendo el movimiento villero, el del asentamiento con la mística y el norte de los 70.
Porque la sangre derramada jamás será negociada, volvimos mojados pero con la alegría de haber instalado en el corazón del 2001, la Av. de Mayo, que estamos haciendo un nuevo camino, porque como dijera Miguel Hernández, "...se hace camino al andar..."
Walter Gonzalez
Asentamiento 17 de Noviembre
Coordinadora de Barrios y Asentamientos del Gran Bs.As.
Probablemente no haya querido compartir ese sitial en el que nosotros, los que tenemos la ¿suerte? de pisar esta castigada tierra, lo ponemos. Él, al igual que Julio López, se convirtió en otro símbolo de la inutilidad de creer que el aparato represivo sirve para algo que no sea reprimir, coartar, cercenar, bloquear, impedir, no-ser.
Luciano está y no está, al igual que el resto de los 30.001 desaparecidos, con el agravante siniestro de que, al igual que Julio López, los chicos y chicas secuestrados en la trata de blancas con el completo aval de la clase dominante, desapareció en democracia. Se ve que con este sistema se come, se cura, se educa, pero no se puede garantizar el derecho a ser libre.
Parece que en Lomas del Mirador, el gobierno mira para otro lado… o con el ojo desviado, si se quiere.
¿Querían seguridad?Ahí la tienen: un destacamento donde, de forma totalmente inconstitucional, la policía detiene y golpea brutalmente a luchadores del campo popular.
¿No alcanza? Perfecto: movámonos hacia San Isidro, donde se intentó construir un muro que lo separe de San Fernando.
¿Demasiado lejos? Quedémonos en Buenos Aires entonces, donde el Gobierno de la Ciudad desaloja Puerto Pibes, lugar de educación formal y no formal para pibes de escuelas públicas y se lo cede a la armada-hasta-los-dientes Policía porteña.
Entonces, queda claro que el momento es ahora, y el lugar, donde sea que a la gente la asesinen, torturen o desaparezcan por luchar para que no haya gente asesinada, torturada o desaparecida. Donde sea que haya un pibe con hambre, donde sea que avasallen la educación pública, la salud, la vida misma. Esos, y no los actos en los centros clandestinos de detención, son los auténticos derechos humanos. Los 30.002 desaparecidos lucharon por eso, no por una placa de bronce y un voto.
El capitalismo pretende igualarnos a todos, convertirnos en mera fuerza de trabajo que, de vez en cuando y citando a Hegel, elige su propio amo. En definitiva, nos quiere alisar a todos bajo el mismo sitio: el de la obediencia.
¿Nos quieren alisar?Arruguémonos.
Se lo debemos a Luciano y el resto de los compañeros que no están.
En la tarde del lunes 27 de abril, el Presidente Evo Morales dio un discurso en la Facultad de Derecho.
A pesar de que hubo una pequeña repercusión de último momento, el salón de actos se colmó de gente que apoyaba al presidente boliviano.
En un principio, Evo nos contaba de su visita por la Argentina “allá por el 95 o 96”, en el que se encontró con estudiantes de la UBA. Recordando dicha anécdota, si bien el discursoestaba dirigido a cualquier interesado que estuviese presente en la facultad, Evo enfatizó en los estudiantes universitarios argentinos y a la juventud en general.
Más allá de quién estaba dirigido o no, lo que Evo intentó hacer fue dar una muestra de lo que pasó y pasa en Bolivia.
Partiendo de la vieja historia, en su discurso contó que “desde 1940 que Bolivia tiene déficit fiscal y desde el 2006 que estoy a cargo del gobierno, estamos en superávit”. Gran parte de éste giro económico se debió a la nacionalización del gas y de los yacimientos de hidrocarburos.
También nos advirtió y nos recordó del intento de golpe civil de derecha que se gestó el año pasado apoyado e inflado por los medios de comunicación, indicándonos que la lucha de un pueblopor su liberación es ardua pero satisfactoria.
Globalizando el discurso, Evo empezó a tratar el tema del capitalismo y la crisis financiera. Primero, denunció que el mismo imperialismo fue el que gestó la crisis y que ha demostrado que el capitalismo es un sistema que fracasó y que no va más. Partiendo de dicha premisa, Evo propuso al socialismo como única vía en el cuál el ser humano puede vivir de manera digna y sin hambre.
Haciendo un poco de historia, el Presidente de Bolivia, nos refrescó la memoria de la expulsión de Cuba de la OEA en 1962. Evo al cuestionar dicha medida y preguntando porqué, le contestaron “Porque Cuba es marxista-leninista”. A lo que Evo no dudó en contestar “Entonces soy marxista-leninista”.
Los repetidos y calurosos cánticos y aplausos fueron síntoma de la alta aceptación por parte del público en respuesta al discurso del líder boliviano.
Entre los que concurrieron al lugar, se encontraba la presidenta del INADI María José Lubertino, representantes de la comunidad boliviana en Argentina, agrupaciones como “Los Pibes de La Boca”, CEPA, Libres del Sur, Proyecto Sur y miembros de La Mella y el Partido Obrero.
En cuanto a nuestra Cristina Kirchner, Evo hizo una pequeña referencia de apoyo, del cual tuvo su respuesta en cánticos de juventudes kirchneristas que se encontraban en la platea, el resto del público prefirió permanecer en silencio.
Casi al cierre, Evo Morales nos deleitó con una conclusión de la cual llegó de un análisis de la madre tierra, la pachamama y las multinacionales que contaminan el mundo:
"El ser humano sin el planeta Tierra, deja de ser un ser humano… pero el planeta Tierra sin el ser humano, sigue siendo planeta Tierra"
Entendemos que este mundo está regido por un sistema criminal, una forma de vivir sobre la base del lucro individual y la explotación del prójimo; características que arrojan lo peor de la condición humana. Esto se evidencia tanto en nuestra vida como en los hechos globales que afectan al sistema como tal.
Nuestra opinión
A partir de esto, surge un primer punto: nuestra absoluta disconformidad con la actual situación. No estamos conformes y nos rebelamos contra el estilo de vida impuesto, donde nuestro futuro es una condena a la muerte por hambre o contaminación –entre otras- o a la vida sumergida en la monotonía y el vacío; donde el único progreso permitido es de esencia material excluyente, imponiendo reglas de competencia envilecida, donde lo individual excluye el concepto de bien común. De la misma manera, reafirmamos el reconocimiento del derecho que nos asiste a todos a disfrutar por igual de los recursos naturales que forman parte del territorio donde vivimos, y nos oponemos a las consecuencias del incumplimiento de ese derecho inalienable: millones de seres humanos padeciendo insuficiencias alimenticias en cantidad y calidad, frío o calores extremos, enfermedades prevenibles y una significativa ausencia de amor. Esto es si no encuentran una de las mil formas de morir de un desposeído en esta sociedad, determinada por políticas exterminadoras de “los que sobran para no achicar el reparto”.
No nos agrupamos para cambiar simples aspectos de este sistema o embellecerlo.
Nos agrupamos en tanto hacemos una crítica estructural y de llano contra el modo de vida que nos ofrecen los grupos de poder y el sistema que rige actualmente.
Nuestras reivindicaciones
Somos conscientes de la historia que nos precede, de quienes ofrendaron y ofrendan hoy en día sus vidas, desde su más sincera humildad, a la ciclópea tarea de intentar cambiar la realidad creada por el individualismo exacerbado y egoísta, luchando contra la opresión rebelándose contra las injusticias, trabajando para construir una alternativa basada en el bien común.
En este sentido, creemos en la fuerza creativa y transformadora de los pueblos, de las masas, de los trabajadores, como sujetos revolucionarios, en pos de concretar una sociedad justa, libre y soberana.
Por lo tanto, no creemos en las vanguardias iluminadas que pretenden dirigir al pueblo y enseñarle cómo hacer la revolución y cómo liberarse. El cambio se lleva a cabo, acompañando al pueblo, ni un paso atrás ni uno adelante, formando parte de él, asumiendo la identidad cuerpo a cuerpo.
El pueblo latinoamericano, al que el argentino pertenece, posee una importante y heroica trayectoria de lucha y resistencia frente a la opresión.
Estas distintas expresiones de la lucha por la liberación se dieron de diferentes maneras a lo largo de la historia con diversas expresiones desde la resistencia de los pueblos indígenas al exterminio y colonización europea, la lucha por la primera emancipación del yugo español, las Montoneras Federales, la experiencia de organización del primer movimiento obrero anarquista y comunista, la resistencia peronista, los programas revolucionarios de la década del 60 y 70, la lucha contra la dictadura y la resistencia al neoliberalismo.Estos hechos históricos son muestra también, de las contradicciones que anidan en el interior de nuestra nación, tales como pueblo y antipueblo, oprimido y opresor; formas de entender la separación entre aquellos que ansían vivir una vida humana y los que pretenden hacerlo a costa de otros.
Sabemos que estos son movimientos históricos que lucharon por la liberación y la libertad que, sin embargo, no estuvieron exentos de contradicciones. Con plena conciencia de eso, creemos que de ellos se puede aprender y construir una nueva alternativa. Es en esa tradición de lucha por la liberación que queremos inscribir la nuestra, como una continuación histórica de la misma.
Nuestra visión de América Latina
El continente es, como desde hace largos siglos, azotado constantemente por entrega, saqueo e injusticias. Está hundido en la pobreza estructural y en la desigualdad, con el visto bueno de los imperios de turno que, como no puede ser de otra forma, están en concordancia con las oligarquías locales y las clases políticas parasitarias y cómplices.
Hoy, frente a una oleada de gobiernos pseudo progresistas, encontramos que la situación de fondo no se ha modificado en lo absoluto. Hay sin embargo, países que han iniciado un aparente y discutible proceso de cambio, como Bolivia, Venezuela o Ecuador. A pesar de la salvaje oposición y constantes ataques por parte del imperio estadounidense y sus aliados, tanto locales como extranjeros, los pueblos de dichas regiones se han hecho valer resistiendo y fomentando los movimientos liberadores. Estos son los procesos que apoyamos, en tanto representan una esperanza para todo el continente.
Nuestra visión de Argentina
En nuestro país, hubo un punto de quiebre luego del proceso iniciado en 2001 bajo la consigna “que se vayan todos”, que hacía clara alusión a la clase dirigente rentista y parasitaria que, tras la vuelta de la democracia, sólo condujo por el camino “democrático” e “institucional” los designios coloniales y antipopulares cuyas bases vino a implementar la dictadura genocida de 1976.
Siguiendo esta línea, en 2003 comenzó la era kirchnerista, gestando un ficticio mar de esperanza en millones de trabajadores y trabajadoras, fundada en una retórica progresista que evocaba lo mejor de la generación de los 70, aquella que dio todo por la liberación del pueblo.
Años después, no sólo podemos afirmar que no ha cambiado la situación de fondo –ya que este no es ni por asomo un gobierno en pos del pueblo- sino que, en varios aspectos, se han profundizado políticas de neto corte antipopular e imperialista, es decir, una etapa más del saqueo iniciado en la dictadura.
La oposición que el sistema nos pretende vender, tampoco la supera, y en muchos aspectos, es incluso peor. Bajo un manto de supuesta apoliticidad, quieren venderle al pueblo líderes cuyos apellidos figuran entre aquellos responsables de su miseria, de sus ausencias y desgracias. Representantes del FMI, de las patronales, del empresariado, de la derecha liberal o la derecha conservadora, que pretenden que el pueblo firme su propio certificado de defunción.
No se puede transformar la realidad con una clase dirigente que se llena la boca de palabras ajenas y las ensucia, ni con la clase que encarna a los sectores que históricamente fueron responsables del mutilamiento del pueblo, ni con una clase que pretende hacer de la sociedad una construcción histórica con valores e idearios que le son totalmente ajenos, fuera de los contextos históricos, políticos y sociales.
Sí creemos en la política. No creemos en esta política, totalmente corrupta, individualista y miserable. Para cambiar nuestra situación hay que acabar con la vieja clase política, sus prácticas y sus personajes.
Nuestra propuesta
Construir nuevos canales de participación y democratización, así como reinventar prácticas para un nuevo modelo de nación, participativa, justa y solidaria. Esto es posible en tanto el pueblo tome en sus manos la misión de transformarla, sin intermediarios.
Para esto, nos proponemos tres ejes de acción:
Universitario Queremos refundar la universidad pública, que sea accesible para todos –lo que incluye, claramente, a los hijos de los trabajadores, ocupados y desocupados-. Nos oponemos al elitismo imperante y a la privatización silenciosa.
No queremos que esta sea un instrumento que alimente a la clase política corrupta anteriormente descripta, ni que sea garante del sistema vigente como formadora de cuadros técnicos, políticos y filosóficos que lo encabezan y perpetúan.
A la vez, cuestionamos y nos preguntamos cuál es el fin de nuestra formación, a qué proyecto de país queremos contribuir y cuál debe ser el rol de la universidad pública y el modelo educativo impartido en ella. En este sentido, tomamos distancia de la agenda que proponen desde las prácticas de la vieja política y las discusiones estériles y mezquinas que algunas corrientes y expresiones políticas del ámbito universitario, que se reivindican de izquierda, plantean. Consideramos que esto sólo contribuye a alejar a la universidad y el movimiento estudiantil de las mayorías populares y la realidad política.
Cultural Creemos que la cultura, entendida como un modo de expresión específicamente humana, es una herramienta muy poderosa que está siendo utilizada en todo su esplendor por aquellos que oprimen al pueblo.
Estamos en presencia de una dictadura de los medios de comunicación al servicio del poder, amparada en el constante bombardeo de imágenes y palabras infames y mentirosas desde la televisión –principalmente-, radio, cine y periódicos tendiente al vaciamiento espiritual de la vida, a marcar la agenda política, a crear e infundir miedo, a distraer de las cuestiones centrales y esparcir la ideología dominante para hacerla propia en cada uno. Por todo esto creemos primordial la formación de una contracultura, una contrainformación de carácter popular, que sirva como herramienta de lucha y afirmación de nuestra propia cultura e identidad. Por eso es vital la lucha contra los medios de comunicación concentrados y los grandes grupos económicos que manipulan día a día la información, en pos de democratizarla y fortalecer una cultura más humana, social y solidaria.
Territorial El contacto con nuestro pueblo, con los trabajadores y desposeídos de nuestra sociedad, es vital para sentirnos parte de él y hacernos uno mismo. Hay que poner en práctica la solidaridad activa y operar directamente sobre la realidad, con el fin de transformarla.
El trabajo territorial es parte de la formación política de un militante, para poder aprender del pueblo. A la vez, consideramos que entablar y estrechar estos lazos es fundamental para superar la escisión entre universidad y pueblo.
Emprendemos este camino, convencidos de nuestra voluntad de transformación de la realidad, acompañando al pueblo en el largo y arduo camino de la liberación. El objetivo es claro, y no tiene vueltas.
Porque nos reivindicamos una Corriente Popular por la Liberación, que se propone combatir en tanto parte del pueblo, a los enemigos internos y externos para avanzar en la simple idea de un mundo donde la vida sea digna de ser vivida por todos los hombres y mujeres que lo habitan.
¡Ni un paso atrás! ¡Las mismas banderas, la misma lucha!
Libres o muertos: ¡Jamás esclavos!